Ubicado en la turística zona de la Carihuela, en Torremolinos, este apartamento fue diseñado tanto para la explotación turística como para el uso ocasional de sus propietarios. Al abordar este proyecto, los propietarios me solicitaron que conservara algunos elementos de la casa con valor sentimental, pero que me deshiciera de muchos otros que habían sido elegidos sin un criterio claro. El objetivo principal era transformar el espacio en un lugar más acogedor y funcional.
Los trabajos incluyeron la instalación de una nueva iluminación que realza las características del apartamento, así como la renovación de elementos decorativos para modernizar su apariencia. Se incorporó mobiliario funcional, diseñado para ofrecer comodidad y estilo a la vez, adaptándose a las necesidades tanto de los propietarios como de los huéspedes.
Un aspecto clave del proyecto fue aprovechar al máximo el potencial de la impresionante terraza de 45m², que cuenta con vistas increíbles al mar. Para ello, se seleccionaron muebles de exterior cómodos y resistentes, junto con detalles decorativos que invitan a disfrutar de este espacio al aire libre. La terraza ahora se presenta como el corazón del apartamento, ofreciendo un lugar ideal para relajarse y disfrutar del entorno, convirtiéndose en un gran atractivo tanto para los propietarios como para los turistas.